El Oviedo Baloncesto ganó a
Aurteneche Maquinaria (77-58) en su último encuentro en casa
Al término del partido equipo y
afición celebraron el ascenso
Con aire de fiesta, incluso antes
de comenzar el encuentro, el Oviedo Baloncesto despedía la categoría en casa.
Los de Guillermo Arenas disputaron un partido igualado que únicamente se rompió
en el último cuarto. Sin embargo, los asturianos demostraron que a pesar de ser
matemáticamente campeones, la derrota no entra en su vocabulario, y decidieron
despedir la categoría ganando 77-58.
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| Los jugadores con su trofeo |
Con una afición entregada que
abarrotaba Pumarín, el Unión Financiera Asturiana trató en arrancar. En un
primer cuarto marcado por las imprecisiones de ambos contendientes, el Oviedo
Baloncesto fue el que menos falló, y eso que desde la línea de tres puntos
tanto Víctor Pérez como Diego Sánchez no mostraron su habitual precisión. Con
un 17-14 a falta de escasos segundos, una falta de Agustín Prieto costaba a los
carbayones dos puntos, para establecer el marcador final de 17-16.
En el segundo cuarto el Oviedo
trató de desmelenarse, pero no en exceso. Los de Iñaki Merino llegaron a
ponerse por delante en este cuarto, gracias a un colosal Hedgepeth, pero un
arreón final de los de casa hizo que el marcador al descanso se fuera con un
38-29.
En la segunda parte, el tercer
cuarto mantuvo la tónica del primero, marcado por los continuos fallos. La
primera canasta, con firma de Elias, llegó cuando había pasado más de un minuto
de la reanudación. El Oviedo Baloncesto, sin embargo, supo poner pausa al juego
cuando era necesario. Y conscientes de que a un intercambio de golpes y de
fallos, ellos serían superiores, cansaron a su rival hasta hacerlo dócil.
Forbes, el hombre que más trajo de cabeza a la defensa del OCB fue protagonista
con un gran mate a poco de finalizar el cuarto, pero Ola Atoyebi no se debió
quedar muy contento con el protagonismo de su rival, y tras pase de Carles
Marzo, copiaba a su homónimo machacando la canasta de Aurteneche.
El último cuarto fue el de la
liberación. Las defensas presionantes del OCB comenzaban a dar sus frutos, y el
equipo se movía más cómodo entre transiciones y ataques rápidos. En este último cuarto, el protagonismo fue
para Álex Lesmes, quien volvía al equipo tras un largo parón. El canterano del
club, tras perder una pelota y cometer una falta, se sumó a la fiesta anotando
un triple para deleite del público de Pumarín que aplaudió la canasta como si
de un final igualado se tratase.
Tras el encuentro, fiesta en el
pabellón. El club homenajeó a sus patrocinadores, y posteriormente, el
vicepresidente de la Federación Española de Baloncesto, Juan Martín Caño,
entregaba la copa de campeones a los jugadores locales. El capitán y veterano
Adrián Macía recogía tal distinguido trofeo.
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| El argentino Agustín Prieto cumplió con la tradición |
Posteriormente, el delegado Julito
Rocha, como si de Pepe Reina se tratase, se hizo con el micrófono y puso en pie
al pabellón, coreando el nombre de todos los integrantes del equipo. Agustín
Prieto, como ya es habitual, fue el encargado de subirse al aro a cortar la red
de la canasta, y es que el argentino ya no debe tener espacio en su casa para
más. El resto de la celebración se prolongó hasta altas horas de la noche; un
ascenso a la segunda categoría del baloncesto español no se logra todos los
días.
ÁVILA PARA ACABAR LA COMPETICIÓN
El Oviedo Baloncesto viajará a
Ávila sin nada que jugarse. El conjunto asturiano despedirá la competición el
sábado a las ocho de la tarde. De nuevo la Federación ha optado por unificar
horarios ante la disputa por los puestos de playoff que darán a conocer al otro
equipo que acompaña a los ovetenses a LEB Oro.
Si el equipo asturiano llega con
los deberes hechos, el Grupo Eulen Carrefour El Bulevar de Ávila está a la espera
de determinar su posición final en la tabla. Novenos, con seis victorias y
trece derrotas, el equipo que dirige Armando Gómez podría quedar fuera de los
puestos de playoff si pierde y Cafés Aitona gana a CEBA Guadalajara en casa.
El equipo abulense se ha ido
desinflando a medida que avanzaba la competición, ya que no ganan desde el 26
de enero, cuando anotaron 112 puntos frente a Cafés Aitona, precisamente su
rival para acceder a los playoff de ascenso. Capaz de lo mejor, como aquella
tarde, pero también de lo peor, pues se
quedaron en 45 puntos frente al colista de la categoría, el Gran Canaria 2014.
Los de Ávila son el segundo
equipo de la competición con peor porcentaje de tiros de dos y de tiros de
tres, solamente superados por Cafés Aitona y Gran Canaria 2014. También son el
conjunto que menos balones recupera de toda la LEB Plata.
En el plano individual, su
jugador franquicia, Riley Luettgerodt es el segundo máximo anotador de la
competición, solamente superado por un gran Will Hanley. Luettgerodt consigue
una media de 16,89 puntos por encuentro. El resto de jugadores del equipo no
alcanzan la decena de puntos de media. Además, su pívot senegalés Moussa es el
cuarto máximo reboteador, con una media de 8,79 por partido.
RECEPCIÓN EN EL AYUNTAMIENTO
Como tras cada ascenso de un
equipo de la ciudad, el Ayuntamiento de Oviedo recibió a sus héroes. La
plantilla, cuerpo técnico y algunos de los patrocinadores del club, acudieron
al encuentro con Agustín Iglesias Caunedo, primer edil de la ciudad.
El presidente del club Fernando
Villabella, mostró las copas de campeón de Adecco Plata y de subcampeón de la
Copa a Caunedo, quien se dedicó a felicitar al club por los éxitos conseguidos.
El alcalde ya presenció más de un encuentro en Pumarín esta temporada, y el
sábado pasado no dudó en sumarse a la fiesta del ascenso.
