Remontada con golazo. Real Oviedo 2 – UD Logroñés 1

El cuadro carbayón dio la vuelta ante los riojanos

El gol de Pardo de falta fue de lo más destacable del encuentro

Real Oviedo: Orlando; Alba, Pardo, David Fernández, Sergio Rodríguez; Susaeta (Annunziata, minuto 86), Héctor Simón, Erice, Eneko (Sergio García, minuto 72); Señé y Cervero

U.D. Logroñés: Miguel; Ormazabal, Gil, Garrido, Sergio Martínez; Javi Rodríguez, Moisés (Omar, minuto 70), Goñi, Ubis (Nando, minuto 63); Ibai (Domínguez, minuto 80) e Iriarte

Llegó la primera victoria en casa para el Real Oviedo. Y lo hizo con mayor sufrimiento del deseado. El equipo asturiano fue mejor que la UD Logroñés, pero un tanto de los riojanos cerca del descanso, pudo hacer que los oviedistas se quedaran sin sumar. Sin embargo, los goles de los dos defensas centrales del equipo, David Fernández y José Antonio Pardo, fueron suficientes para sumar una nueva victoria que aúpa a los azules al liderato de la competición.

Y es que el tanto de Pardo quedará para la posteridad. El defensor valenciano le pegó con el alma, y la pelota entró por toda la escuadra de la meta defendida por Miguel. Además, se puede decir que en líneas generales el Real Oviedo dominó el encuentro prácticamente de principio a fin. Un choque que estuvo marcado por la dureza empleada por los jugadores riojanos que, inexplicablemente, finalizaron el encuentro con once futbolistas.

Señé golpea la pelota ante la oposición de un rival.
Hugo Álvarez

Sin embargo, los visitantes tuvieron una ocasión clara al poco de arrancar el encuentro. Fue el delantero centro, Iriarte, quien con un disparo cruzado a punto estuvo a punto de batir a Orlando, quien logró despejar de puños. El Real Oviedo tuvo la réplica con una doble ocasión que en primera instancia detuvo un defensor con la cara y después desbarató Miguel.

Y es que cuando hablamos de la dureza con la que los visitantes se emplearon, la muestra más clara fue la agresión sufrida por Señé en el minuto 18. El catalán recibió un codazo en el cuello cuando el colegiado no estaba mirando, por lo que consecuentemente no señaló infracción alguna.

El cuadro de Carlos Granero dominaba el partido. Los riojanos no creaban ocasiones, mientras que Diego Cervero pudo adelantar al Real Oviedo de haber rematado correctamente una gran pelota colgada por Jon Erice desde la banda derecha. Sin embargo, al borde del descanso, en una ocasión aislada para el cuadro riojano, Sergio Rodríguez, completamente solo, mandó la pelota por línea de fondo para no complicarse. El problema fue que a raíz de ese córner, Gil marcaba el gol que adelantaba al Logroñés. Una serie de desajustes defensivos y un Orlando Quintana que se adelantó ligeramente fueron la causa del gol riojano. Lo intentó el Real Oviedo con dos saques de esquina antes del intermedio, pero sin fortuna.

Tras la reanudación, de nuevo se empezó con polémica, al reclamar los azules un penalti sobre Señé. Poco después, fue el catalán quien, tras jugada individual, disparó pero con poca potencia y desviado. Sin embargo, apenas dos minutos después, el empate iba a llegar para el conjunto asturiano. En esta ocasión, un lanzamiento de falta de Eneko encontró rematador en David Fernández. Miguel detuvo la pelota en primera instancia, pero el rechace le volvió a caer al defensa del Real Oviedo que, de una forma casi instintiva, empataba el partido.

El gol de Pardo entró por la escuadra. Hugo Álvarez

Los 8.250 aficionados que presenciaron el encuentro de ayer se crecieron, y el propio Eneko anotaba un gol, que fue invalidado por fuera de juego, una decisión un tanto rigurosa que acabó por encender a los aficionados azules. Pero lo mejor del encuentro quedaría reservado para el minuto 62. Una falta lejana, aparentemente para ser colgada al área, fue preparada para José Antonio Pardo. Flanqueado por Eneko y Susaeta, le dejaron la pelota al defensa central que, con un trallazo quitó las telarañas de la escuadra del fondo norte del Tartiere. Miguel nada pudo hacer ante la potencia y la velocidad que llevaba la pelota.

A partir de ahí, el Real Oviedo se echó para atrás, debido a los cambios ofensivos introducidos por el Logroñés. Sin embargo, la entrada de Sergio García por Eneko permitió que las contras de los azules pudieran ser letales. De hecho, el zamorano pudo marcar en una jugada en la que a pesar de que Miguel la tocara con las piernas, el árbitro señalara saque de puerta.

A pesar de que el Logroñés se echara al ataque, los azules trataron de controlar la posesión dentro de sus posibilidades. Una muestra de ello fue la jugada en la que Héctor Simón y Jon Erice se asociaron en múltiples ocasiones en un corto espacio de tiempo. Los riojanos apelaron al coraje y a las jugadas a balón parado para empatar, pero el Real Oviedo supo cerrar un encuentro que le coloca como colíder, con diez puntos, empatado con el Celta “B”.

GRANERO: “LE HEMOS DADO LA VUELTA A UN PARTIDO COMPLICADO”

El técnico oviedista cree que sus futbolistas no se dieron por vencidos y “creyeron en lo que hacían, para darle la vuelta a un partido complicado”. Para el entrenador azul, “hemos mantenido el criterio e iniciamos las jugadas desde Orlando Quintana” a pesar de conocer lo que el rival se dedicaría a hacer durante la segunda mitad “cortar el juego con faltas tácticas”.

Granero mostró su satisfacción por el buen momento del equipo y por el estrecho vínculo que mantiene con la grada-. Para el valenciano, “el mensaje que hemos recibido es que estábamos haciendo las cosas bien y había que continuar con esa línea para que la gente estuviera de nuestro lado. Lo hemos conseguido y la afición ha visto un equipo que cree y hace las cosas con lógica.”

Po poner algún pero, el gol visitante llegó de nuevo tras una acción a balón parado, como sel segundo del Noja. Sin embargo, el entrenador azul considera que fue totalmente acierto del rival y no fallo defensivo de su equipo porque “teníamos colocados en ese palo a David y a Cervero”. Otro hecho importante que el preparador azul destacó es que los goles de su equipo “no solamente vienen por mediación de Diego”.

A pesar de obtener el liderato, Granero concluyó con que eso es algo que no le preocupa en exceso a estas alturas de la competición. Para él, son más relevantes “las sensaciones y que el equipo vaya creciendo”.