miércoles, 27 de febrero de 2013

Wembley hero… local hero


Michu se proclamó campeón de la Capital One Cup con el Swansea
Los galeses derrotaron por cinco goles a cero al Bradford de la cuarta división inglesa

Al igual que la canción de Dire Straits, Miguel Pérez Cuesta (Michu), se convirtió en un hñeroe en Wembley al llevar al Swansea galés a su primer título a lo largo de su historia. La canción de Knopfler y compañía habla acerca de un hombre en soledad, en la gran ciudad, y que a pesar de todo, sabe que algo grande empieza, “sitting here and waiting on the beating of my heart”.


De este modo se puede definir la historia de Michu, un jugador pasional y acompañado de una gran técnica, que ahora mismo vive su momento, y que fue capaz de rechazar jugar en Primera División por el amor a unos colores.  Tal y como continúa al letra de los Straits, “if you can live in this town, and stick around, you can live anywhere”, Michu puede quedarse en Swansea, o quizá su futuro estará en un grande.


Ni en sus mejores sueños, y eso que calidad no le falta, se podía pensar en el gran crecimiento como futbolista de Miguel Pérez Cuesta en las dos últimas temporadas. Ya nos hicimos eco en estas páginas de la gran campaña que estaba haciendo en el Swansea City, equipo galés de la Premier League, dirigió por el danés Michael Laudrup.

Michu con el trofeo. @michuoviedo

Y por fin se alcanzó uno de esos objetivos que todo futbolista anhela en su carrera deportiva, levantar un gran título. Michu lo hizo el pasado domingo, y prácticamente sin despeinarse. Enfrente estaba el Bradford, equipo de la cuarta división inglesa, que en la temporada 2000-2001 aún estaba en la Premier (¿a qué os recuerda esa historia?) y que ya hizo la machada eliminado a equipos de la máxima categoría inglesa a lo largo de la competición. Cargándose al Aston Villa en semis, pero echando también a Arsenal, Wigan, Burton, Wtford y Notts County, la ilusión de los ingleses les permitiría competir contra un equipo de superior categoría.


Sin embargo no fue así, y el encuentro se despachó muy rápido para los “cisnes”. Un buen disparo de Michu, en quien estaban puestos todos los focos en la final, fue aprovechado por Dyer para subir el primer tanto de los blancos. Chut desde el pico del área, raso y ajustado,  el cual el guardameta del Bradford logra detener, aunque no sin dificultades, y entonces aparece Dyer para meter el primero. La importancia de Michu en el Swansea es clave. Bajo la figura del “falso nueve”, pero a veces como referencia arriba, Laudrup sabe sacar el máximo partido al canterano oviedista.


Y como decíamos, su técnica es determinante. En el minuto 40, tras una gran diagonal del asturiano,  que recibe un pase de Pablo Hernández, de nuevo en el pico del área. Tras un intento de amago, un disparo muy similar al anterior, raso, ajustado al palo largo, e inalcanzable para el portero. Los cracks no fallan dos veces, y Michu, esta vez sí, se lleva la mano a la oreja.


Con el encuentro de cara, Michu siguió sumando. En el tercer tanto interviene en la jugada, aunque sin tocar la pelota. Dos de sus compañeros realizan una pared y Michu, en un alarde técnico, deja pasar el cuero entre sus piernas no en una, sino en dos ocasiones, para despistar a los rivales. Es para enseñarlo en los colegios, como un jugador es partícipe de un gol sin tocar la pelota en la jugada. Tercero para los galeses y final muy encarrilada.


De Guzmán anotaría dos tantos más, y así la copa se fue para el “Spanish” Swansea, equipo en el que, a día de hoy, cuatro españoles conviven: Michu, Chico, Ángel Rangel y Pablo Hernández, y que con Laudrup intentan imponer en las Islas un juego basado en el toque más que en la fuerza, en la precisión más que en el físico. Y la apuesta está saliendo bien. Un título y clasificación para jugar la Europa League.

Michu triunfa en el Swansea. Vavel.com

El asturiano ya declaró en varias ocasiones que se siente plenamente aclimatado en la Premier League, y más que eso con el fútbol que quiere jugar el Swansea, ciudad donde Michu lleva una vida muy tranquila, permitiéndole centrarse plenamente en el fútbol, y seguir creciendo.


Y así, Michu, aquel muchacho que debutaba ante el Club Siero en el Carlos Tartiere en otoño de 2003, estará diez años más tarde jugando competición europea, bien con el Swansea, equipo por el que ha renovado recientemente, o bien en otro grande, pues es probable que muchos de los equipos top del viejo continente se empiecen a rifar a este muchacho.


Una alegría más de este futbolista, cuyo siguiente paso parece ser una llamada para vestir la camiseta de la mejor selección española de la historia, y que estando en las Reino Unido, hará que los seguidores de su equipo se sientan orgullosos de él, pero también un puñado de oviedistas sacará pecho cuando los merecidos éxitos de aquel muchacho, que con granos en la cara debutaba en el Carlos Tartiere anotando gol, sigan llegando, cuando el “local hero” se convierta aún en algo más grande de lo que es.

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