martes, 8 de enero de 2013

Repercusiones de una humillación

El equipo trata de reponerse de cara al encuentro del domingo
Gritos racistas contra Owona en El Molinón

Hay quienes lo califican como la derrota más dolorosa de la historia del Real Oviedo. Y puede serlo. Lo del domingo no eran tres puntos más, sino un partido que por desgracia había que jugar, y solventar. Pero no se hizo así, y el equipo no dio la cara.

Las repercusiones fueron inmediatas. El consejero del club, Pedro Zuazua publicó en su cuenta de twitter, nada más acabar el partido el siguiente comentario: “Que te golee (4-1) el filial de tu eterno rival es la mayor humillación que existe en el fútbol. Quien lo probó, lo sabe.” Saltaban las alarmas. Y también las consecuencias. El entrenador del Real Oviedo era preguntado ayer en rueda de prensa por estas declaraciones.

Al terminar el encuentro, y antes de subir al autobús, Diego Cervero, de lo poco salvable en el partido de ayer pedía perdón a la afición ante la prensa. Resulta curioso que quien menos merezca palos por lo ocurrido ayer sea quien dé la cara. Diego Cervero no se entrenó hoy al estar en el parte médico del club, con una sobrecarga.

Otro de los capitanes hablaba hoy tras el entrenamiento. Aitor Sanz, quien aseguró que había sufrido ayer la peor derrota de su carrera deportiva. Además, en la línea de su compañero, Diego Cervero, pidió disculpas  a los aficionados azules “por la imagen del segundo tiempo, que creo que no fue la adecuada de un equipo como el Real Oviedo, que siempre había demostrado que se dejaba todo en el campo y que competía al máximo.”
Imagen del acta del partido de ayer

No fueron las únicas repercusiones tras el partido de ayer. Un sector de la afición del Sporting profirió gritos racistas contra Lucien Owona. Así lo recogió en el acta el colegiado gallego Eiriz Mata. El camerunés reaccionó ante esta polémica asegurando que “quienes me insultaron son tontos y gilipollas. No saben que tengo dos amigos negros en el Sporting”. 

Además, el jugador del Real Oviedo afirmó que este tipo de gritos no le importan mientras está jugando, además de reclamar a la Federación que actúe.

Repercusiones varias las que deja el encuentro de ayer. Esperemos que el domingo que viene las declaraciones vengan en otra línea.

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