Va por ti, Armando Barbón, va por ti

Hoy se cumplen nueve años de la trágica muerte del jugador oviedista

Siempre ha estado presente, desde entonces, en la afición y en el equipo

Corría los minutos de descuento en el Estadio Adolfo Suárez de Ávila y Aitor Aldeondo ponía el quinto gol en el marcador del Real Oviedo, y se conseguía virtualmente el ascenso a 2ªB. En una de las cabinas de narración, Miguel Fernandi en bable entraba en éxtasis con los micrófonos de Radio Sele.  “Merecémoslo, va por ti, Armando Barbón, va por ti”, gritaba el Burilo, mientras festejaba el tanto del de Andosilla. Y esa frase nos quedó marcada a muchos.

Armando ve siempre a su equipo.Dawlad

Armando Barbón nos dejaba tal día como hoy hace nueve años, y parece que fue ayer. Los oviedistas nos despertábamos felices, con la idea de volver al Tartiere para celebrar un partido más la supervivencia de nuestro equipo, para verlo jugar, en esta ocasión frente al Ribadesella. Pero las primeras noticias nos impactaban. El joven interior zurdo del Real Oviedo, nos había dejado junto con otros amigos, en un accidente de coche. El oviedismo no daba crédito.

A partir de ese momento, el cielo pasó a ser más azul que de costumbre, y el Real Oviedo, jugaría con doce futbolistas todos los partidos. El oviedismo correspondía con su cariño: “Armando, te quiere la gente del Tartiere”, se convirtió desde entonces en uno de los cánticos que resuenan en el estadio de la Ería.

Con el paso del tiempo, una estatua de Armando se erigió en una de las esquinas del Tartiere. Es muy común ver a Blanca, su madre,  a la que tengo el placer de conocer, viendo los partidos junto a Armandín. Junto a esa melena que parece que quiere correr para volver al campo y ayudar a sus once compañeros de azul.

Hoy el Real Oviedo vive sus momentos más difíciles desde 2003, y seguro que Armando, desde el cielo, está ayudando. Su familia, desde aquí, también lo hace. Ayer sus padres sumaron su granito de arena en la ampliación de capital, suscribiendo sus 100 acciones del club azul. Quieren que el club de los amores de su hijo, siga adelante. Lo quieren por Armando, y por el gran sentimiento que imprime toda esta familia que es el Real Oviedo.

A la frase de Miguel Fernandi a la que me refería al principio,  puede recurrirse en todos y cada uno de los éxitos del oviedismo. Y este lo será también. Seguro. Va por ti, Armando. Allá donde estés.