El Real Oviedo entierra sus
opciones en El Sardinero
Los de Robles no reaccionaron
hasta el segundo gol
Real Racing Club: Alejandro;
Orfila, Javi Soria, Juanpe, Saúl; Iñaki, Borja Granero (Mariano, minuto 76),
Andreu, Ander; Miguelez (Rubén Durán, minuto 85) y Koné (Concha, minuto 87)
Real Oviedo: Orlando Quintana
(Pol, minuto 18); Álvaro (Iván Rubio, minuto 81), David Fernández, Pardo,
Sergio Díaz; Héctor Simón, Annunziata, Señé; Susaeta, Alain y Sergio Rodríguez
(Diego Cervero, minuto 60)
De nuevo se juntaban los
ingredientes propicios para una debacle azul. Gran desplazamiento, partido
trascendental para no marcharse de la pelea por los puestos altos y rival de
entidad. Ese cóctel volvió a dar el resultado ya conocido por el oviedismo,
derrota y sensación amarga para los casi 3.000 aficionados desplazados a las
gradas de El Sardinero.
Y es que el conjunto que dirige
Robert Robles no plantó cara a su rival hasta que éstos anotaron el segundo
tanto. El Racing que aparentemente se dedicó a esperar al Real Oviedo durante
la primera parte, creó más peligro en los cuarenta y cinco primeros minutos que
los azules. En la segunda mitad, los de Paco, más decididos a ir a por el
partido, mataron a los carbayones en dos acciones resolutivas.
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La afición azul se desplazó en masa a Santander. Hugo Álvarez |
Y es que Robert Robles sorprendió
con el once inicial que puso en el terreno de juego. La presencia de Señé en el
medio centro y la entrada de Sergio Rodríguez en la banda zurda, como extremo,
fueron las principales novedades. Álvaro ocupaba el puesto de David Alba en el
lateral diestro.
Pardo parecía tener fijado al
mayor peligro cántabro, Koné, pero el costamarfileño se zafó de la defensa azul
para crear una gran ocasión a los cuatro minutos. Orlando se encargó de
desbaratarla. En esa jugada, el meta canario del Real Oviedo se lesionó, y a
los doce minutos fue sustituido por Pol Freixanet. Los carbayones, aún con la
posesión del balón, apenas inquietaban al equipo cántabro. Sergio Rodríguez
caía constantemente en fuera de juego.
Las acciones ofensivas del club
carbayón se reducían a los aportes de Susaeta y de Señé. Al borde del descanso, el Racing de Santander
gozó de su oportunidad más clara. Un disparo desde la frontal del área del
asturiano Miguélez, tras quedarse el balón muerto en la frontal, a punto estuvo
de batir a un Pol ya vencido. El balón del jugador racinguista no encontró la
escuadra por centímetros.
En la segunda mitad, los
cántabros salieron más acertados y con ganas de solventar el partido ante un
Real Oviedo que no les inquietaba. Koné estuvo cerca de marcar en una de las
primeras acciones tras la reanudación. Fue Miguélez, a los tres minutos, quién
si encontró fortuna. Una vaselina del delantero cántabro, ante una salida en
falso de Pol, adelantaba a los locales.
Sin apenas reacción por parte de
los azules, en un contragolpe, los de Paco hicieron el dos a cero. En esta
ocasión, el autor del tanto fue Koné. Un nuevo desajuste en la zaga carbayona
era castigado por la delantera racinguista.
Cervero ocupó el lugar de un
desacertado Sergio Rodríguez, y salvo por la primera cartulina amarilla, el
ariete oviedista volvió a aportar al equipo. Los azules si metieron a los
racinguistas en su área, pero no crearon excesivas ocasiones de peligro. Los
disparos de los jugadores oviedistas se encontraban en numerosas ocasiones con
el cuerpo de los defensores del Racing. Tras una falta botada por Susaeta se
llegó a reclamar mano dentro del área, algo que el colegiado no observó.
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Cervero es empujado por un jugado racinguista. Hugo Álvarez |
La ocasión más clara sería para
Álvaro Cuello. Tras jugada a balón parado, la pelota le llegó al lateral
asturiano, pero su disparo, entre tanto defensa local dentro del área, fue
flojo y a las manos de Alejandro. A destacar también que, a lo largo del
encuentro, los racinguistas se emplearon con gran dureza, lo que el árbitro
permitía.
A falta de cuatro minutos para el
final, el extremo Ander Lafuente puso en jaque a la defensa azul. Su chut,
desde dentro del área, se encontró con el cuerpo de Pol Freixanet. El vasco fue
un auténtico quebradero de cabeza para los defensores del Real Oviedo a lo
largo del choque.
La derrota de ayer deja
prácticamente sin opciones de liderato a los azules y comienza a complicar seriamente su presencia en el
playoff de ascenso. Los aficionados carbayones, a la par que decepcionados con
su equipo, tuvieron incidentes ante la presencia de los ultras del Racing de
Santander. Según informan varios medios de comunicación, seis de los hinchas
azules tuvieron que ser atendidos en el hospital.
ROBLES: “NO VOY A VENDER MOTOS”
El entrenador del Real Oviedo se
mostraba dolido tras la derrota del día de ayer. Robles lanzaba un mensaje a la
hinchada carbayona y aseguraba que “quiero transmitir a los aficionados del
Real Oviedo que se de dónde vengo, a lo que vengo y valoro lo que hacen para
seguir al equipo a domicilio en la actual situación que vivimos. Estamos
fastidiados por esa gente y por el resultado, que no fue el esperado. No voy a
vender motos, sino ahora mismo lo importante es levantarnos cuanto antes y
seguir trabajando porque el sábado tenemos un partido importantísimo”.
En cuanto al partido, el míster
recalcó que “asumo la derrota de hoy, felicito al Racing pero este resultado no
me va a hacer cambiar de opinión en cuanto a lo que tengo que hacer”.
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